En el lago todo está tranquilo,
apenas se ve en el cielo una nube,
un pájaro solitario,
el resto de un eco lejano,
mientras tú, mujer derribada por el recuerdo,
sigues buscando en el agua quieta
aquella pasión de sus palabras,
el último respiro de un mes de octubre,
cuando el otoño sólo te traía
las hojas amarillas de los álamos.
Foto
Qué quietud de otoño y de recuerdo, que solo el movimiento lento de las hojas que flotan en un lago la ahuyenta.
ResponderEliminarun beso,
ana
Los sentimientos del pasado rara vez vuelven..
ResponderEliminarel pasado vuelve como espejismo...
ResponderEliminara veces un eco cansado
un abrazo
Procuremos no quedarnos en el pasado. Muy bello.
ResponderEliminarBesos
Alba