Un faro llama a la noche,
sin ella no es nada:
un grito silencioso al cielo.
Puedo demorarme en tu cuerpo,
hacer de él un sarmiento encendido
que ilumine todo tu deseo.
Mis manos se abandonan a tu piel
y pueden reanudar tus sueños
como si nunca nos abordará el día.
Como faros se rinden ante ti
y te besan con su caliente anhelo
en el añil indescifrable de un nuevo abril.
Foto
Eres faro y ella noche. Ojala siempre sea abril. Precioso Fernando, besos muacks¡
ResponderEliminarUn faro que llama a la noche porque sin ella no es nada... una mujer que clama por su amor, porque sin el tampoco lo es... un hombre, un cielo, belleza de palabras...
ResponderEliminarmil besos
Un faro que ilumina el deseo...
ResponderEliminarBello.
Un saludo.
Me encanta la manera desbordada en que te toca Abril.
ResponderEliminarBesos.
Me gusta tu faro y lo que describes. la luz que guía al navegante. la senda que le indica donde rompen la olas y termina el mar. Sí, me gusta tu faro.
ResponderEliminarSaludos desde Galicia .
Marnie
Con tus palabras, Fernando, hasta los candiles quisieran ser faros...qué hermoso poema.
ResponderEliminarMuchos besos, Fernando.