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domingo, 6 de noviembre de 2011
He caminado hasta aquí
He caminado hasta aquí, venado herido de la vida.
He llegado hasta los limites que se deshacen
como papel mojado. No tengo final, ni limite
que me sostenga en la caída brutal que me precipita
al abismo del dolor en la tierra de los desposeídos,
en la tierra sin futuro, que se revela y me revela
ante la pasividad funesta de mi existencia.
He camino hasta aquí, pájaro de los álamos dormidos.
He sido despojada del nido en el útero sangrante,
he volado sin rumbo, con las alas recién nacidas.
Soy libélula de cenizas que vuela
hacía el crepúsculo de los océanos del mañana.
Amparo Sanz Abenia
sábado, 5 de noviembre de 2011
LAUDES
Los laúdes de la mañana
me despiertan con sus páginas.
La luz de sus palabras, preludios
que se elevan desde el fondo marino
hasta las cumbres troqueladas,
que ensalzan la voz divina,
lumbrera de gozos que sacian mi alma.
Son sílabas sagradas,
son cánticos de lluvia generosa,
de manantial que brota
de las grutas del verdadero amor.
Mis oídos campanarios del alba
escuchan sus poemas celestiales.
Cantar de cantares, en bosques encendidos
con ardientes llamas, llamas
que iluminan la senda del supremo amor.
Y corro por las páginas
que son pasto de sabiduría,
y me poso en los recodos más profundos
del bosque misterioso,
y absorta gozo de los laúdes.
La luz de sus palabras.
Y me bebo sorbo a sorbo
la dulce agua de sus páginas.
Amparo Sanz Abenia
viernes, 4 de noviembre de 2011
EL BAILE
En el adagio del salón brillabas,
luz de neón, esfera de purpurina,
peonza que nos hace girar.
Diez metros por cinco
multiplicaban espejos voladores
en la oscuridad del universo.
Y la música nos elevó,
almas trasfiguradas en cuerdas de violines
que nos resucitaron entre ángeles sin alas.
Amparo Sanz Abenia
jueves, 3 de noviembre de 2011
EL CASCABEL DE LA JUVENTUD
Nunca me aflige el cascabel
de la juventud de ayer.
Su esplendor subsiste en mi recuerdo.
Puedo contener en mis versos
la juventud lejana,
sobre mi piel hacer florecer las margaritas,
y las amapolas salvajes del ayer glorioso.
De los amores tempranos me guardo sus fragancias
las furtivas caricias, los besos silvestres, los sueños en flor.
Amé con locura sobre la hierba jugosa.
Sacie sin cordura el deseo en mi piel…
Aún recuerdo el palpitante ritmo, el vértigo
que hace transformar al corazón enamorado
en el esplendoroso cascabel de la juventud.
Nunca me aflige el cascabel
de la juventud de ayer.
Su esplendor subsiste en mi recuerdo.
Amparo Sanz Abenia
miércoles, 2 de noviembre de 2011
ESPLENDOR EN LA HIERBA
Aunque ya nada pueda devolvernos la hora
del esplendor en la hierba
y de la gloria en las flores,
no hay que afligirse,
porque la belleza siempre subsiste en el recuerdo.
WORDSWORTH
Amparo Sanz Abenia
martes, 1 de noviembre de 2011
RETRATOS
Tibia y dulce la memoria
encuadra el pasado en un rincón.
Un paisaje físico, una mirada herida
que desborda lágrimas bajo un cristal de olvido.
Metacrilatos de amnesia sobre la mesa.
Recuerdos que solapan recuerdos.
Raíz de olmo que engarza una unión,
la lluvia de arroz, el arroz en los zapatos,
la sonrisa del pastel en los labios.
El si quiero retratado
en las estanterías de un salón.
Todos los recuerdos posan enmarcados.
La mirada dulce y tibia
encuadra toda la memoria en los retratos.
Amparo Sanz Abenia
lunes, 31 de octubre de 2011
AUSENCIAS
Cuantos días sin escribirte.
Necesito hojas donde imprimir mis versos,
necesito la tinta que inundan mis meninges
para escribir en el pergamino de tu piel.
Cuanto amor guardado
en el nido acuoso de tus estancias.
Cuanto esperar al atardecer para que nos despierte
entre sábanas de arco iris.
El tiempo del encuentro ha madurado,
las lluvias de la ilusión verdearon nuestras ramas,
el viento de la noche cimbreó las ausencias
de los años que la vida escondió.
Ha llegado el día, la hora precisa.
Debo escribir sobre tu piel, pergamino de seda,
con la tinta que inundan mis meninges
un poema que acaricie lentamente,
lentamente todas tus estancias.
Amparo Sanz Abenia
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