martes, 27 de marzo de 2007

Queimada

De David Mayor en su libro “EN OTRA PARTE” el poema Queimada.


Aquella noche la tengo en los dedos:
la espalda de tu cuello, las palabras justas,
la querencia.
Tú llenabas el silencio y sonreías,
los demás esperábamos
la señal para bebernos las sombras,
las palabras anudadas, el licor antiguo.

Y luego siguió el viento deambulando
y te guardé en los dedos para siempre.

10 comentarios:

Simplemente Olimpia. dijo...

El autor sigue embriagandose del recuerdo, que más que alcoholizar, permite guardar la pócima de ese sortilegio (encuentro) y revivirlo.

Olimpia.

Fernando dijo...

Yo sigo poseyendo recuerdos que embriagan..tú no?..besos.

Simplemente Olimpia. dijo...

Por supuesto! pero no se trata de acaparar tu espacio de comentarios con los recuerdos que atesoro.(soy avariciosa).
Incído; rechazo aquellos que producen una mala resaca o amargor como último sabor(no por su alta graudación);).
Prefiero, no obstante, (como dije)beberme presentes y futuros.

Olimpia.

ybris dijo...

Sorprendente lucidez de los dedos almacenando recuerdos.

Bello poema.

Fernando dijo...

Me parece estupendo Olimpia..demuestras que eres positiva y eso es muy valorable..un beso.



Ybris ...sé que con tu sensibilidad comprendes perfectamente al poeta...por cierto este poema del libro es el que más me gusta..un abrazo.

Anónimo dijo...

Precioso Fernando.
A mi también me ha gustado eso de guardar recuerdos entre los dedos...

Fernando dijo...

De todas maneras se podría hacer un relato muy sensual con esto...un beso amiga..;);)

Ana B. dijo...

Entre tus primeros 'post' de febrero está mi estreno... Tu selección de autores me ha enganchado, aunque sinceramente, no sé cómo he llegado hasta este espacio tuyo. Yo también guardo nombres entre mis dedos ... para SIEMPRE.
¿Puede abrazarte una extraña?
Un abrazo

Anónimo dijo...

¿No serán escurridizos los recuerdos entre los dedos?, algunas veces son como la arena y escapan por cualquier rendija.
Hermoso poema, vive dios.
Besos.

Fernando dijo...

GRacias Ana...me doy por abrazado, espero que me sigas comentando...


Creo Gregorio que los recuerdos sólo se escapan cuando no interesasn...y a veces ni esos...un abrazo.