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domingo, 15 de julio de 2012

Señores de Barro




Ciegos damos pasos y tomamos decisiones
mudos intentamos dejar presencia
sordos a toda señal

los ancestros parecen mirarnos
las palabras quedan en tablillas fijadas
y el eco se nos pierde entre tanto ruido

luces y sombras proyectadas en tiempos
que se revuelven y se enroscan
en su propia maraña de voces

y aquí vamos entre el ayer y un sueño
confrontando realidades alternas y relativas
eclécticos señores de barro
intentando dar cuerpo
a un pensamiento a un sentimiento humano.

Pulsos que se descuelgan del espacio
algunos los ven
algunos los escuchan
algunos los proclaman.



Elisa Alcántar Cereceda


sábado, 14 de julio de 2012

Pienso en ti




y no tengo opción
no tengo salida
porque te pienso todo
y en mí... las palabras se desbordan
me mojan y arrastran el sentir
este sentir que se aloja en cada pulso
en cada hebra de mi lienzo
que pinto porque te pienso
porque el color de mi voz estalla
y en aristas sinuosas se desplaza
como mi lengua en tu recuerdo
porque sabes ... pienso en ti
y caigo desde mi seguro consciente
a mi insolente desapego
que me recoge para instalar
un pensamiento...tú
que me lees , que me miras
que me interpelas lúdico
eres en este momento mi pensamiento
el que todo lo ocupa
el que todo lo convoca
y me lleno de ansias locas
que recorren mi humanidad limitada
y siento batir alas de mariposa
con su zigzagueante destino
soy un camino que aún no acaba de escribirse
porque la tinta de mi pensar
está en tu personal universo hoy.



Elisa Alcántar Cereceda


viernes, 13 de julio de 2012

Malhaya




Cuánta sangre fue necesaria para decir patria,
cuánto sol estremecido,
cuánta traición montada entre las piernas,
mar y desierto, turba y engrillados.

Quién nombró la historia como juego de niños
para que el odio fecundara tantos vientres ;
usando fusiles se enrieló el desacato;
tantas fueron las manos que amasaron fortunas,
miles de cabezas destroncadas
como alimento en las batallas ,
unos rifando los cargos supremos
otros , tiñendo de espanto, llanto y pólvora tronada
las alamedas de los ideales buscados.

Malhaya suerte de reinos y bastardos
carne de los campos en malva sembrados,
la muerte baila a sus anchas
una cueca larga, tan larga como la memoria.

Nos apiñaremos a la sombra de los caídos
y miraremos con ojos de futuro,
nuestros labios gotearán las babas de soledad histérica
con la ruina del pie descalzo y el yugo coronado de silencios,
y los días serán para inventar héroes de consuelo
fuegos y miedos arroparán estos cuerpos estrellados.

Cuánta patria repartida en la torta bacanal,
herederos somos de las maravillas conquistadas
generación mimetizada con la marca en la frente
historia y verdugos , humo en plural del tiempo belicoso.



Elisa Alcántar Cereceda


jueves, 12 de julio de 2012

Hombrelobo




Que delicia pensarte
te mueves acechando
eres el deseo personificado
el rubor húmedo que eriza toda mi piel
devoras cada noche de mis noches solitarias
mi luna te aguarda
mi sed tú la calmas
eres lo fiero que mi vientre goza
el sendero por donde tus huellas me queman
eres animal indómito en mi aposento de versos
cómo presionas el destino
juegas con el influjo de la distancia
tu aullido me enloquece
y quiero más, siempre más.
Vibra la vida en tu mirar
la noche se refleja en ella
y feliz me pierdo en tu cabello
olvidándome de toda responsabilidad.




Elisa Alcántar Cereceda


miércoles, 11 de julio de 2012

Costilla




Y es eso que de tanto en tanto se enrosca al alma
y no deja que mi pie avance hasta desenrollarle en vida,
es lo que me ata a tu costilla
hombre de silenciosa estampa.

Buscarse entre las multitudes de años
hallarse en el escondrijo del corazón solitario
hacerse cómplice de tu mano por la calle
con la aventura para estallar al alba .

Dónde pondré mis deseos si mi carne aún los sujeta
y es que esta hambre de hembra sigilosa
es flama en tu continente viril
el cual parece sucumbir al perfume de la rosa.

Las palabras son el señuelo
las caricias , arrullo de paloma;
mas tu presencia es mi refugio
donde quedarme segura.




Elisa Alcántar Cereceda


martes, 10 de julio de 2012

Estrías de Santo




Yo confieso ante ustedes
ante mi propio pasado
ante mi pecado mortecino
que no me arrepiento,
que soy aliento errante
un camaleón de las palabras,
una serpiente enroscada
lista para volar,
una corona de rosas sangrantes
dispuesta para quien la quiera recibir.

Por mi culpa
por mi gran culpa
salió este verbo encabritado
y cruzó el abismo hasta la tierra de tus padres,
allí el sol cegó estos ojos
mas no pudo matar la mirada,
y es que no dejé nada para la guarida
apenas un verso desnutrido.

Y en el final de mi falaz poema
solo quedaron las marcas en este costado,
lo profano abierto en la mente del verdugo
y fuí animal sesudo
hueso y pellejo con estrías de santidad.



Elisa Alcántar Cereceda


lunes, 9 de julio de 2012

Los que nadie quiere ver




Migajas recibidas
en pequeñas manos agradecidas
tocan puertas,algunas abren
almas de niños...caminantes.

Ojitos que claman ayuda
vagando solos en la penumbra
menudos cuerpos yacen apretujados
bajo los puentes... enmarañados.

la ciudad los devora sufrientes
solitarios mundos
pies errantes y dolientes.

el hambre ametralla en sus pancitas,
el frío entume vuestras manitas,
la desesperanza cala en lo hondo
esta pobreza que toca fondo.




Elisa Alcántar Cereceda


domingo, 8 de julio de 2012