lunes, 7 de mayo de 2007

Que diera por esconderme

Magdalena Lasala en su nuevo libro "Y ahora tú pasas tu mano osadamente" nos deja este poema: QUE DIERA POR ESCONDERME



Qué diera por esconderme un día bajo
la mesa de tu despacho
rival de mi fiebre
y esperar callada a que llegaras
ocupado, como siempre.
Ellos se sentarían al otro lado,
tú vendrías a tu sillón y no dirías nada
tragando el respingo de verme
ahí abajo recibiendo
lo oculto de tu cuerpo
sin remedio.
Te sabrías
a merced de mi presencia secreta,
a mi merced ese fruto
que recoges todos los días
bajo esa misma mesa, en medio
de tu reunión.
Controla ese rojo que te sube por el rostro
y acostúmbrate a mirar
antes de sentarte
en tu sillón de importante.

4 comentarios:

Asha dijo...

Ya no daría nada por esconderme..

Besos.

Fernando dijo...

Tiempo, evolución, vida..un beso.

Chalá perdía dijo...

Vuelvo a leer este poema que ya pusiste en tu otro blog y le veo una nueva luz inspiradora jajaja.

Fernando dijo...

;);)..no coment.