Otras veces la humedad es lo que queda,
un resto,
la memoria de un temporal o un torrente desbordado,
la resaca barrosa y pertinaz de una crecida,
los recuerdos que impregnan muros marcados por graffitis de un cielo
[desmoronado.
Pasó el temporal, se saca o seca el barro,
más bajo la superficie asoleada
engañosa y disfrazada la humedad persiste.
En realidad siempre estuvo
allí
tenaz
agazapada.
Fernando Ainsa
1 comentario:
Excelente.
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