viernes, 14 de marzo de 2008
No me debo demorar
No me debo demorar.
Ni siquiera en la derrota
me debo demorar entre tus piernas
y el calor del regazo que me cubre.
Cabe morir con el sabor de la sangre,
entregado al verso embrutecido,
envilecido en el deshonor del alcohol,
en el sendero de noches de lujuria...
con otras pieles,
otros matices,
otras luces,
otras mentiras.
Fotografía aquí
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4 comentarios:
Buscar lo que se anhela en otra piel y después el desengaño... Muy bueno, estás pletórico Fernando. Un beso.
Pero mira que desengañarse asi.. jjajaja, al menos vives, no? que a algunos les parecera malvivir y para otros... es un desengaño cotidiano..
:P
Besos.
Nany.-
Y no sería mejor masticar y tragar?
pasar página y seguir simplemente viviendo?, por qué huir, por qué no hacer frente a la ausencia?
Un beso,
ana.
Vertiginoso.
Y muy bueno.
Un abrazo.
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