viernes, 20 de julio de 2012
N.Y.
¡Ciudad mía, mi amor, blanca mía! ¡ah, esbelta,
óyeme! Óyeme y un alma te infundirá mi soplo.
Suavemente en el caramillo, ¡escúchame!
Ciudad mía, mi amada,
eras una doncella todavía sin pechos,
esbelta como un caramillo de plata.
¡Ahora óyeme, escúchame¡
y un alma con mi soplo te daré.
Versión de Javier Calvo
Ezra Pound
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario