Soy moldeable, elástico entre sus manos.
Impregna sus huellas, clavándome su estigma en mi cuerpo invertebrado.
Moldeo al hombre que engendró su verdadera obra.
Impregna sus huellas, clavándome su estigma en mi cuerpo invertebrado.
Moldeo al hombre que engendró su verdadera obra.
En estos tiempos no quieren ser princesas,
ni ellos pretenden ser príncipes azules.
Preparados para no arrodillarse,
e incubar lamentaciones y encules.
Me pongo a planchar. No quiero una esclava,
ni un espectro habitando la casa.
Hoy no te haré arrumacos, es día de masturbarse.
¿Si he planchado? No soporto que seas falsa,
ya sé, ya sé que colaboro poco en casa,
no te prometí el paraíso o el edén.
Ya he terminado la colada,
he planchado los zapatos de cristal y mi camisa blanca,
al rey le he dado de comer y le he acostado en su cuna dorada.
Rafael Luna
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