lunes, 2 de noviembre de 2009

EL DOLOR DE LA LUZ




En la sombra está su nombre inscrito
como un estigma que a la luz renuncia,
invisible y no obstante poderoso,
latente como el dolor que cada día,
cada día, por simple azar burlamos.
Otro día, al fin, te rendirás
a su esplendor imbatible, a los brillos
de su daga, a la final herida de su filo,
y permanecerás ahí, incrédulo,
creyendo ser un sueño fugaz
lo que no es sino la propia rigidez
de tu nombre desde ese momento
perfilado contra un fulgor inmóvil.
Y ambos serán ya uno para siempre,
ungidos a la memoria de aquellos
que dejas y se irán más despacio
(pero se irán) cediendo al vacío
otro vacío, otra asombrada oquedad
para el relámpago, para otro olvido.


EPITAFIO
Si para morir he merecido la vida,
deseadme mejor muerte.




Manuel Martínez Forega


Premio del jurado IV Premio poesía de miedo



3 comentarios:

ybris dijo...

Premio merecido. Mi enhorabuena.
Ya había leído en Doberka la noticia.
Me alegra poder leer aquí el poema.

Abrazos.

Libros Gratis dijo...

Muy bonito poema, enhorabuena pues es genial de verdad.

Olga dijo...

Muy buenos poemas. Yo me compré el libro, pero me gusta verlos aquí también, con este fondo entre azul y malva, brillando en la pantalla.
Un beso.