jueves, 31 de marzo de 2016

Mi Amado...



Mi Amado, los peces estivales se retiran, se van a las cuevas y a las fosas, con un espolón sobre su frente. Entre las algas se pierden sus omóplatos, y resbalan por el mar, como luceros.

Hay plantas junto a mí que me acreditan, y en la contemplación de la extensión azul del aire, voy con la marea que asciende hasta la volubilidad del cielo.

Arde el agua y en la tierra se oye un grito. La sacerdotisa sangra, y al sangrar, mantiene el fuego que la adora, y alimenta la pira donde será sacrificada.

Hay posos de alquitrán en las antorchas, vestigios lunáticos que acceden al interior del templo, y ante la Dama palpitan su blancura.

Como árboles nacidos en la clandestinidad, se dibujan las nubes que arraigan en la misma lluvia, y que al llover mueren del amor que las preñó de agua.

En los estanques se derrama el verbo, el mismo que fue derrotado por el mal, que se levantó y levantó la piedra que guardaba su vigilia.


Teresa Domingo Català







miércoles, 30 de marzo de 2016

Llegan los sueños...



Llegan los sueños como nenúfares que arden en la intimidad. Son inicios de un amor desesperado, un amor que a sí mismo se concierne, que no duda, y su certeza se ve multiplicada por los astros.

¿Qué hay en la manzana que la alude? ¿Qué linde se me presenta en la piel del deseo? ¿En qué iglesia el rezo de la madrugada se convierte en un mar desnudo?

Hay un telar en el borde del vacío donde se hilan los anhelos. Allí regresa Ulises desde Itaca, allí arriba el barco y se eleva la memoria de las olas, allí se posa la sal, en la añoranza de Circe y de Penélope.

Oh jazmín, hay una luna escarlata entre las piernas del mundo, un leopardo que la lame entre la nieve con una esmeralda en la lengua.

Una península brilla en el istmo. Brilla la arena que le recorre las playas, brilla la espuma que desvanece las raíces del agua y le pone una voz muda, una voz que habla en el silencio poblado de estrellas en los ojos del Cordero.


Teresa Domingo Català



martes, 29 de marzo de 2016

Las cadenas de las grúas rematan el cielo...



Las cadenas de las grúas rematan el cielo, y su azul queda suspendido en el mismo aire donde habita.

Una cremallera me atiende cuando subo al ático: va hacia atrás y hacia adelante, hacia atrás y hacia adelante, hacia atrás y hacia delante y así infinetisimalmente hasta llegar al mismo cierre.

Una apertura en la pared: es una grieta y me iza hasta el techo. En el techo giro como una cucaracha, una cucaracha que se hubiese enamorado de tus rosas, y ennegrecida, palpito girando y girando sin parar en el oscuro tramo por el que desciendo hacia las baldosas del suelo.

El yeso se desprende, y el cemento. Miro cómo se alinean los cobardes, y como el pelotón fulgura frente a mí, con los fusiles preparados y las balas en su sitio. Es así porque el amor a veces se tiñe de escarlata, el escarlata del Carnaval de la muerte, su único disfraz.

Oh mi amor, pagaré mis culpas, y mi mayor culpa, haberme enamorado, haber visto a Dios en tus ojos, porque Él, que es invisible, se muestra en todos los espejos.


Teresa Domingo Català






lunes, 28 de marzo de 2016

Siento el temblor del aire...



Siento el temblor del aire, suspira magnicidios, y sé que me amaste y me has amado.

En las navajas hay un sueño que completa la sedición, y en la tortura de no verte soy capaz de asesinato y de blasfemia.

Camino mi tristeza por la Alhambra, y en sus paredes rojas escribo el pensamiento.

Oh, amor, me arrebataste de tus labios, y como una estela en un mar de nadie lo atravieso con la desesperación del que naufraga.

Entre los pecios, tu sonrisa. Me la devuelve el papel donde me diste tu lágrima, donde apuntaste tu nombre con un lápiz.

Bebo absenta y cruje la penumbra. Abandono la luz para buscar en las rosas tu reflejo. Dormito con el alba y es la noche la que me envuelve entre su oscuridad.

Mi niño, sólo te pido que regreses, que me regreses y me ames, repartir contigo el amor y todo el tiempo que se revela como el ámbar.


Teresa Domingo Català 



domingo, 27 de marzo de 2016

Semana dedicada a Teresa Domingo Català
















Si encuentro algún tropiezo...



Si encuentro algún tropiezo

en el camino
entonces lo haré de piedra
pisaré descalza
mis pies han de encontrar
las huellas de tus pies cansados
al andar

buscando la puerta del laberinto
que ahoga tus sentidos,
el canto del alba se ha dormido
en el tiempo
ya no espera el amanecer
las metáforas asfixian estos versos
de esta historia de amor que se cierra
con el cincel de la vida

y tú, al otro lado del mar azul
que nos separa llevando arrugas de penas
cree en mí no soy tu verbo
pero...tienes mis manos. ojos, piel, vida
para ayudarte a encontrar la felicidad
tu eres la verdad en mis pupilas

fui creyéndome y descubrí
que soy el resumen de una mentira
sola con mi amor a cuestas
ese amor que no habla que vive en su silencio

Mi vida siempre ha sido una mentira
... no existo...



Blanca Pérez Rama Ibarriola.



sábado, 26 de marzo de 2016

Deseos de amar



Vestirán de blanco

mi alma

bajo la luz del alba

llenarán de nardos mi lecho

el viento beberá su aroma

el sonido de la luz ha de perderse

dentro de mis poros

buscando tu imagen

en la memoria de mi cuerpo

perdida en el silencio

de la piel dormida

en la sombra de tus besos

sed de amor y deseos

danzan en el paladar de mi cielo

en el vacío desierto

de mis pechos erizados

ungidos de tus labios

estelas de amor

dejadas por la humedad

de tu ardiente boca en flor


Blanca Pérez Rama Ibarriola






viernes, 25 de marzo de 2016

Lágrimas negras



Enredada en sombras apretado el llanto

prisionero del silencio quemo tus recuerdos
esparciendo las cenizas bajo los olmos
del parque donde tallaste tu nombre
lágrimas negra cubren las mejillas mojando
las raíces cubiertas de polvo
tiembla la tierra levanta gemidos llevados
con furia por el viento
el tiempo burló mis sentimientos cegando
los ojos como arena envuelta en remolinos
callo mi grito embriagado de pena levantando
olas de nostalgias
guardo los besos y aroma dejados en mi piel
se apagaron los cantos como hojas muertas
en primavera
escribo esta poesía para llenarme de tu amor
lazando las manos de rodillas junto a la hoya
rezo una plegaria
lluvias de estrellas van cayendo como flore
dentro de mi alma


Blanca Pérez Rama Ibarriola






jueves, 24 de marzo de 2016

Se va el año...



Se va el año

y con él
mi amor
que lejos
han quedado
las noches
cuando llegando
la alborada
te dije...
¡Te amo,
eres mi amor!
Nada es eterno...


Blanca Pérez Rama Ibarriola



miércoles, 23 de marzo de 2016

Desolación



De mi silencio sube este canto

surgido un día de las entrañas
del dolor y la tierra de nuestra carne triste
un átomo de luz de nuestra frente
hará brotar el milagro divino de una flor
más bella que la estrella nacida en el amanecer
reflejada en los campos yermos

acaso llene un día todo de soledad
el ensueño que está devorando mi vida sin piedad
el soplo del recuerdo arde como una llama simbólica
nunca podré borrar este signo de fuego clavado está
como una cruz en mi destino

más tus ojos no esperan el alba
en ellos se va apagando el ardor vivo
como un muerto en el camino de los vivos
quiero abrir mis pupilas llenas
de amor y pasión
unir las bocas en un beso de ensueño y locura
te quiero así como un signo que no
revela su destino.

Llora mi corazón en este instante de tanto
haber amado


Blanca Pérez Rama Ibarriola



martes, 22 de marzo de 2016

Tengo que escribir...



Tengo que escribir

para quitar de la mente palabras sin letras

mis versos están en tus sueños

sin las rimas de tus besos.

Tengo que escribir en las oscuras

líneas de mis manos

mojarme en tus labios

respirar en las frías mañanas

sin la aurora de mi ocaso.

Tengo que escribir, mostrarle al mundo

que sin amor no existen las palabras

y no morir en vida

como mueren los suspiros

en el caudal del río de tu boca.

Tengo que escribir, para que tú

me hagas sentir que estoy viva

en el silencio de tu piel me abraces

renazca el amor dormido que llevo en el alma

ver sonreír tus ojos


Blanca Pérez Rama Ibarriola






lunes, 21 de marzo de 2016

Amor ausente


Amor te recuerdo en sueños
mis manos acariciando tu piel
de ébano
blanca áurea rodea tu cuerpo
turbada y triste alejada por misterios
oscuro sin ver la luz de tus ojos
destellos azules van abriendo camino
para llegar a tus brazos
navego en sueños buscando el ayer
perdido
abro lo párpados ebrios de besos
nieblas del pasado desvanecen
tu imagen
en silencio lloro tu ausencia
acurrucada en mi lecho exclamo
¡ Por Dios cuanto te amo !


Blanca Pérez Rama Ibarriola



domingo, 20 de marzo de 2016

Semana dedicada a Blanca Pérez Rama Ibarriola



Velando tus sueños



Para Alba



Mientras Cerbero vigila tu cama

vamos sacando los dientes

a los ladrones de sueños.


Despellejo los privilegios

que heredan todos los grifos

y atesoro utopías bajo tu almohada.


Puedo comprender el misterio

del pelícano que se entrega

descuajando sus entrañas.


Apenas se nada de esta vida

y como Casandra grito en los desiertos

a sabiendas que no soy escuchada.


Y si alguna vez falto

ya he pagado a las valquirias

por si perdieras batallas.


Mientras Cerbero vela tus sueños

mi descanso he dado en pago



Carmen Ruth Boillos



sábado, 19 de marzo de 2016

Perfil de riesgo



Ya no busco crédito.

Jamás me gustó contraer deudas

que suben a golpe de celos,

con el caprichoso vaivén

del miedo que oculta

tu letra pequeña.


No quiero pagar a plazos

lo que no puedo abonar de una vez,

para que la usura

consuma mis ilusiones y deseos

que han de seguir siendo puros,

sin plazos fijos de besos de saldo.


No quiero jugarme el alma

amortizando en cadencia forzada

la cuota de deseo que marca

el ibex de tu apetencia.

Ser numeraria de tu cama

contra mi voluntad y por contrato.


No soy mujer de hipotecas

¿Quién puede avalar un sueño?

Si los sentimientos terminan,

el capital pendiente es nuestra quiebra,

y yo soy, por si lo dudabas,

perfil de riesgo.



Carmen Ruth Boillos



viernes, 18 de marzo de 2016

Arráncame el catéter del corazón cansado...




Arráncame el catéter del corazón cansado,

me han robado las pecas dando vueltas a Neptuno

y ya no hay polvo estelar en mis zapatos,

mientras busco el interruptor en lo oscuro.


Han descuajado de raíz cada flor y los olivos

con estos decretos de tijera, y detonado los puentes,

las almas crueles de los pérfidos corsarios

con años de ruina, con elecciones inconsecuentes.


Líbrame de los cuervos de jueves santo

del estigma, del nodo, del destrozo y la bufonía,

dame armas para luchar contra el desencanto.


Devuélveme –si es que puedes– la energía,

el verde a mis pantalones cortos, el canto,

las ganas de creer aún en el hombre y la utopía.



Carmen Ruth Boillos



jueves, 17 de marzo de 2016

Tiempos



Vivimos tiempos de insomnio y miseria,

tiempos en que el vaho recubre el alma,

tiempos de fragilidad y miedo

en los que alguien se entretuvo

envenenando nuestros sueños.


Vivimos tiempos de opacidad y falacia,

tiempos en que se trafica con la esperanza,

tiempos donde retuercen el lenguaje

y envilecen las palabras

para trocar los conceptos.


Vivimos tiempos de vileza y apatía,

tiempos en que impera una gris confusión,

tiempos de cuatreros y ladrones

que expolian tu confianza

malversando ideales y credos.


Vivimos tiempos tan deshonestos,

tan corruptos, tan perversos

que quiero presentar mi dimisión.



Carmen Ruth Boillos



miércoles, 16 de marzo de 2016

Cuerpo embriagado



Cuerpo embriagado

pan ensangrentado

yace sobre la acera.

Una mortal aguja

hace

s

a

l

t

a

r

en

m i l

p e d a z o s

la vida.


El polvo te hizo polvo.

Enclenque tu silueta

tostada por el sol,

acobarda mis ojos,

me hace caer de rodillas

y alzar la mirada

¿por qué?

Pregunta absurda

¿Acaso alguien contestará?


Dejas

c

a

e

r

una sonrisa,

quieres fingir que la sangre

es vino,

que los cuerpos del pasado

son alimento:

pan de enamorados,

pan de amigos,

pan.


De pronto

¡Un escalofrío!

Ojos cerrados

del que no está dormido,

brazos que caen,

silencio herido.


Carmen Ruth Boillos



martes, 15 de marzo de 2016

Callar



Muchos días callo porque soy fácil para el pecado

de perder la esperanza.

Porque no sé luchar una y mil veces.

Porque no gestiono bien la rabia.


Callo vestida de vergüenza

cuando la soledad me abraza

tras una lucha titánica

en estéril batalla.


Callo porque de hablar erraría

al exigir la lucha a los que me acompañan

porque mis palabras serían fuego

y el mundo sería una llama.


Callo porque a veces es mejor

callar que ensuciar palabras.


Carmen Ruth Boillos



lunes, 14 de marzo de 2016



Tu mirada de óleo, me duele,

repasa mis sueños quemados de estío

y mis esperanzas presas de bostezos,

aunque sé que estás a tiempo

de incendiar cada mañana con tus ojos.


Quiero volver a casa, nuestra casa,

que sólo es un estado de ánimo,

pero allí encuentro tu piel vestida

de mayo florido, donde el ejercito cansado

de mi corte de milagros encuentra

el mesías que nos salva.


Allí, mi océano de paz está cubierto

por una pátina de aceite,

donde resbalan mis sufrimientos,

y en la calle, cuando comienza la tormenta

invoco tu nombre y se abren los mares.


Y en silencio, puedo percibir

que el futuro me ha llamado con tu voz.



Carmen Ruth Boillos


domingo, 13 de marzo de 2016

Semana dedicada a Carmen Ruth Boillos




Tengo Un paracaídas...



Tengo un paracaídas

con forma de corazones,

ruido de risas

y calor de reuniones.


Tengo un bote salvavidas

alrededor de una mesa

con unas cuantas botellas vacías;

e ilusiones que en las sillas

van descarrilando

de distintas formas por las vías

que pretenden que dejemos

de celebrar nuetros errores

o manías.


Brindaremos por los cuentos

que nos van a dejar

sujetando el aliento,

porque sólo queremos

ser expertos

en el noble arte

de soñar

y estar despiertos.


Tengo un paracaídas

sin pretenderlo,

sin pedirlo,

sin soñarlo.


Tengo un paracaídas

para todos esos días

en los salto

sin pensarlo.


Carlos Quintas



sábado, 12 de marzo de 2016

Luces de Neón



Luces de Neón

o estampidas

repartidas en montones o en filas

en columnas resumidas

de ganas de perder la cuenta

y llevar alguno que otro de más.


Caer de bruces en tu orilla

con acordes de mar y luna nueva

de sol

de sal

de arena fina y caracolas.


De peces

limón

y de golpes de viento en las olas.


No te quejes, amor

de que corre el rumor

que no tienes castillo.


Mientras quede tu honor

desarmando el valor

del que presume el destino.


Vuelve a mi corazón

donde aún guardo tu espacio

cuando pongo la mesa.


Que cualquier sitio

es un palacio

si en él hay una princesa.


Carlos Quintas



viernes, 11 de marzo de 2016

Echo de menos...



Echo de menos

tu olor

como echaba de menos

tus manos.


Echo de menos calor

como forma de vida

en tus brazos.


Actitudes de un montón

de encadenados

a tu estampa,

aprendices del rincón

de las lombrices

de mi alma.


Será que aún me impresiona

que te sueltes el pelo

como forma de arte

y envuelvas los besos

de despedida

con sabores amargos.



Pero sigo sin ser capaz

de llegar a tiempo

a tus martes;

puede que me esté dejando

los lunes muy largos.


Carlos Quintas



jueves, 10 de marzo de 2016

Hazme un otoño en tu alcoba...



Hazme un otoño en tu alcoba

me susurraban las caracolas

que había robado en tu pecera.


Ata el amor hacia fuera

que así nunca estarás sola

con los sueños que te roban.


Y brindarme,

aunque suene contradictorio,

por violines que haces sonar

en los días aleatorios.


Me cuesta olvidar

que el verano va de antojos,

y a lo mejor solo quieres llover

por volver a oler tierra mojada.


Eres sencilla y de huevos con patatas fritas

eres de chocolate y chaqueta a las siete y media,

de prestarme inspiraciones

de extrañar

de morderte el labio

y de volar sin despegar los pies del suelo;

pero eso tú ya lo sabes.


Hoy te he visto

y te he mirado con esa cara de:

"todo-lo-que-escribo-habla-de-ti"

y tu me has sonreído igual que siempre,

"como-si-no-fuera-contigo".


Lo único que puedo hacer

es que aún sabiendo todo de ti

prefiero suspenderte

y a ver si así vuelves en Septiembre.



Carlos Quintas



miércoles, 9 de marzo de 2016

Pienso en mi...



Pienso en mi

por no pensar en ti

y en todos los futuros

que podríamos haber sido.


Creo

en pasados reciclados

de presentes olvidados

y esparcidos

por todos los rincones

que hay en tu memoria

inacabada.


Sé que dan tanto miedo

las espinas

que muchos

pasan de largo

de las rosas,

y me he quedado mirándote

tanto tiempo

que no recuerdo de dónde venia

y -ahora-

me niego a saber a donde voy.



He visto treguas,

nubes,

caminos señalados

por carteles con cruces;

he visto sombras

y luces

y nunca,pero nunca,

logro saber

a dónde me conduces.


Carlos Quintas



martes, 8 de marzo de 2016

Afuera llueve...



Afuera llueve

y me hace ver

que siguen quedando

días en los que somos más culpables

que testigos,

lunes distintos

disfrazados de Domingo,

con más tormentas

que nubes de algodón.



Aún nos quedan

un par de acordes en la muñeca

y algún que otro

pedazo de estribillo

se nos queda atrapado

en la garganta;

porque no todas las resacas

iban a traer malas noticias

y algunos sábados tan sólo quieren quedarse.



Escucho que habrá que hacer algo

para resistir,

que habrá que pelear,

que remangarse,

me dibujo una franja

bajo los ojos

(con aquel pintalabios

que habías olvidado

en la mesilla),

y saco el hacha del baúl

para bajar a la arena.



Pero es que ahora no te veo

por ningún sitio.



Afuera llueve

y había pensado en olvidarte,

pero joder,

que mejor momento

para pensar en ti

que cuando el cielo también llora.


Carlos Quintas



lunes, 7 de marzo de 2016

Hemos tenido que esperar...



Hemos tenido que esperar

a que suba la temperatura

para poder quitarnos las etiquetas.


He tenido que aguantar

la respiración

para llegar a tu altura

sin campamento base,

ni abrigo,

ni cerezas.


Todavía colecciono intenciones

pero me siguen faltando

los cojones

para dejar de lamentar que mis heridas

ya no se curan como antes;


Puede ser que otra vez

nos pille la tormenta,

pero me niego a volver

sin los diamantes.


Carlos Quintas



domingo, 6 de marzo de 2016

Semana dedicada a Carlos Quintas




EL VIEJO BAR





“Lo peor que puede pasarnos en la vida es sobrevivir"

(Ana María Matute)



He salido a buscarte

sin saber

que los muertos

no vuelven a vivir

hasta que los vivos mueren,

escribe el poeta en unas cuartillas

abandonadas en la mesa del bar.


El ruido de los autos

detenidos ante el cuerpo

distrae unos segundos

al camarero que seca los vasos

mientras mira por la ventana

agradeciendo la última generosa propina

del escritor sin libro.


Francisco Javier Solé Ribas



sábado, 5 de marzo de 2016

SIROCO




Este viento violento

arrasa


las tachaduras en los cuadernos de la escuela

las incertidumbres en las cartas de amor

la reprimenda cálida de la madre

los reproches sin réplica del padre

la falda corta de la vecina morena

las comidas generosas cuando hubo empleo

los regalos de las hijas que te adoran

las equivocaciones en todas las decisiones importantes

las escasas alegrías, dejando intactas las penas más amargas.


Se lo lleva todo

indolente y furioso

como si fueras

un médico sin quirófano

un sepulturero sin cadáver

un niño sin juguetes

un anciano sin pasado

una vida sin recuerdos.


Se lo lleva todo

no te deja nada

nada.

Sólo polvo.


Francisco Javier Solé Ribas



viernes, 4 de marzo de 2016

VERSOS A UNA MADRE MUERTA



Madre,

son malas las noticias que debo darte.


El hijo de tu hijo no se habla con su padre

una de mis hijas juega sola con los muñecos de su hermana

tu esposo falleció gritando el nombre de una mujer que no acudió a su funeral.


Madre,

son malas las noticias que debo darte.


Todas las amigas olvidaron tu nombre

las mujeres del vecindario murieron de cáncer

tu amante negro vive todavía con su esposa.


Madre,

son malas las noticias que debo darte.


Habitan en tu casa unos extraños

las joyas baratas fueron empeñadas hace siglos

el jersey que me tejiste cuando niño se ha quedado pequeño.


Madre,

son malas las noticias que debo darte.

la suerte es esquiva con tus vástagos

somos pobres estamos tristes vivimos solos.


Por eso, madre

si ves alguna de mis hijas,

la viva o la muerta,

no me las entretengas

con historias del pasado,

que regresen pronto a casa

y pueda antes de dormir o de morir

darles un último beso que no se lleve el viento.


Francisco Javier Solé Ribas



jueves, 3 de marzo de 2016

Que alguien le llevé una bufanda





Todos los familiares en el hospital,

muchos conocidos en el velatorio,

tantos amigos en el cementerio.


Ahora,

Al regresar

a la más insultante normalidad

a las comidas sin sal

a las películas sin fotogramas

a los horarios de un reloj sin esfera

a las noches en vigilia

al trabajo insípido,

ni familiares ni amigos

sólo un vecino despistado.


Somos como apestados

que despiden el olor

de la tristeza.

Seres aquejados

de una enfermedad incurable

para la que no hay tratamiento

sólo cuidados paliativos

poemas desolados

lágrimas sin pañuelo

distracciones etéreas.


Estamos solos.

Definitivamente desarmados.


Al pensar en ella

un estremecimiento desbocado

enciende nuestro desvelo.


Hace mucho frío en el cementerio

y salió sin ropa de abrigo


Francisco Javier Solé Ribas



miércoles, 2 de marzo de 2016

RESPONSABILIDAD PENAL



Disculpo,

A la niña malcriada que me negó el primer beso y luego amo a todos los chicos del vecindario.

A la familia que te acepta siempre sin comprenderte nunca.

A los obreros que boicotearon la huelga trabajando a destajo por las noches y a escondidas.

A las amantes que me fueron infieles durante años.



Exculpo,

A los amigos que me delataron en confesiones arrancadas con tormento por los militares.

Al patrón que te despide sin motivo después de explotarte durante años con saña.

A los camaradas que desatendieron sus sueños sin alcanzarlos ni una sola vez.

A mis mujeres, cansadas de mis medias verdades y mis muchas mentiras.


Nada te reprocho

A ti

que ni fuiste ni quisiste

que asumiste la derrota sin apenas batallar

que ganaste alguna vez con cambalache y malas artes

que te pareces demasiado a mí, sin aceptar ser yo.


No perdono

A la Muerte,

a la furcia que arrebata la vida

a una joven de ojos verdes

a la que asisto impotente

mientras su verdugo

acuna entre los brazos

un muñeco de trapo

sucio viejo y triste

que le ha robado a la niña antes de fenecer.


Condeno a la Muerte

a la pena capital.


Francisco Javier Solé Ribas



martes, 1 de marzo de 2016

HE VISTO A ESE JOVEN




He visto a ese joven mirar

los dibujos de los niños de Terzin

junto al cementerio judío de Praga

con indiferencia, insensible



He visto a ese mismo joven medir

el anexo secreto de Ana

en la casa junto a un canal

del centro de Amsterdam

con desdén, impasible



Lo vi también

caminar por las vías del tren

en Auswitch

y jugar en las literas

de los presos

con tibieza, indolente



Al joven,

votante de la extrema derecha

le gusta

conocer los hechos pretéritos,

no por aprender

de la historia,

sino por el gusto

canalla

de reproducirla

evitando errores

repitiendo horrores



La maldad y la ignorancia

son armas poderosas

pero juntas

amenazan arrasar

el mundo.


Francisco Javier Solé Ribas