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domingo, 1 de febrero de 2015

Si alguien me conoce



Si alguien me conoce que rescate quien soy.
Que tome de mí prestado lo que al polen le sirva;
con lo posible de un mundo a otro que pode la luz de algún día.
Y si alguien siente que ese retrato fue fe de fraternidad.
Generoso abrazo de quien no teme los arcos, las catedrales y los barcos.
Generoso de quien no teme el grito de la muchedumbre
por ahogo prematuro a la ovación de las bestias.
Si alguien me conoce que rescate quien soy;
me rece en honor a las pericias... De quien me supo amar.



Cleofé Campuzano Marco



sábado, 31 de enero de 2015

Principio de lugar




La amplísima distribución de las cornisas
avistaba algo más que un par de cabezas;
Un grupo bilateral de entregados a la resistencia,
una orientación central a la caricia y a las piernas convulsas.

Cerré los ojos para entender que era yo
una de esas cabezas, aflojé mi cabellera a ese descubrimiento.
Traté de delimitar los aros crudos que habían cercado los años.
Daban cobertura a este segundo.
La otra parte bilateral me habló y...
Esbocé una sonrisa, desde la otra visión de la ventana.



Cleofé Campuzano Marco


viernes, 30 de enero de 2015

Estepa




Una estepa me involucró en un camino
que no quería recorrer.
Un camino que me hizo dudar
de mis pasados -encontré varios-

Pero no debía incordiar mi paso,
quién mejor que yo para dejarme libre.
Entonces la sola vista de la libertad me retrajo de nuevo.
La retención y la libertad.
Las corrrientes en condena y la soltura en calibre.
Soterro la escena en la que el corazón arde...

Y es que no sé los motivos de que arda,
si por querencia a otros o compasión de sí mismo.
Flamígera su ira, el corazón vendrá por mí.
Aun no he salido de la estepa.


Cleofé Campuzano Marco


jueves, 29 de enero de 2015

Desnudo episodio




Quedaba desafinadamente bien esa luz de candil en los dedos.
Quedaba tan bien en desobediencia con la lámpara
que nos alumbró los rizos.
La rodilla izquierda, trinquete de mi esperanza a tus ojos,
aguamarina de los espacios tibios, ululantes a la estridencia del hecho.
Aseguran unas figuras cautelosas un punto familiar;
aunque fuera insólito en su primer vez.
Quién iba a imaginar que quienes nunca habían visto morir,
enterrarían sus reversos al abandonado suceso.


Cleofé Campuzano Marco




miércoles, 28 de enero de 2015

Desde dentro



Aquello que nos cambia por dentro

es lo único a estimar;

en el ciclo de los alrededores, se inclina

hacia nosotros.


Aquello que nos cambia por dentro

es la agudeza desenfrenada

que, a menudo, se prolonga en

nuestra inquietud de arrojo, a la impresión

que produce sentir.


En el motivo del regreso hacia ti,

sitúas aquello que te cambia por dentro.

y, como en el segundo de nacimiento de un tallo,

vertical y lúcido hacia el mundo,

sales de ti.


Cleofé Campuzano Marco


martes, 27 de enero de 2015

Noches de asalto



Me recuerda tu esbozo a la calle lateral que nunca evidenciamos;
al poco sueño que la noche disimula en el desplome de tus contrarios.
Los propios ojos del asalto levadizo que se esforzaba
por contener nuestra alma.
Unos pocos metros más allá de mi extraño croquis
y un tono más lejos de mi memoria,
quise amar los besos sin mención que quedaron fuera de rango.



Cleofé Campuzano Marco


lunes, 26 de enero de 2015

Ya la veo



Pensando en la niebla, descubrí cajas, un día.
Las cajas que guardan mariposas que dejaron de ser larva.
Dividiéndose cruelmente los estados de un cartón negado
a reescribir sus virtudes, sus maestrías de virtud.

Me permito vivir hacia afuera, no como esos vuelos,
de pavimento. No, me dejo al cartón de aire...
Deberá ser como cuando descubrí esas cajas,
muertas de hambre, como el día cuando diseca tu hora.

El mundo en favor del derecho de los cartones
tiene la belleza de la vegetación trasportada,
la tierra del sol quemado y la actividad de alguien que desiste.

Falta el carácter de la movilidad; sólo en esa valentía anónima...
Pues no sé si sabes que así y sólo así, ya veo la mariposa en la playa.



Cleofé Campuzano Marco


domingo, 25 de enero de 2015