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domingo, 19 de enero de 2014
Éste era el futuro
Éste era el futuro.
Un enjambre de bocas en la piedra,
la orilla con grietas en los labios
y el beso que nace entre las olas
debajo de la tinta.
El tiempo cambia cuando existes.
No borrará la magia de tus ojos.
Domingo Acosta Felipe
sábado, 18 de enero de 2014
Poema dedicado
A Luis Miguel Rabanal
I
Entre el día y la noche hay un instante que estremece.
La luz está descalza sin tu pecho.
II
Sin sueños
no nacen los caminos.
Vivir
es una declaración de amor.
Domingo Acosta Felipe
viernes, 17 de enero de 2014
Llueve en el sombrero hambriento de la noche.
Llueve en el sombrero hambriento de la noche.
En el alarido lento del asombro que no sostiene el aire ni la vida.
En la muerte de los niños poco importa que se crea que son otros y es de día.
Y ya no tengo manos o sangre para el frío.
Sólo el horror dice mi nombre en esos ojos fijos que me miran.
Domingo Acosta Felipe
jueves, 16 de enero de 2014
Beberse el grito y el abrazo
Beberse el grito y el abrazo.
Cambiar la sed con el asombro.
Levantarse
y abrir los ojos.
Y no cerrarlos nunca.
Vivir.
Vivir de nuevo cada día.
Llevarle un sueño al horizonte.
Dejar la muerte sin heridas.
Dejar la vida viva
y con sus niños.
Domingo Acosta Felipe
miércoles, 15 de enero de 2014
Dónde exiliarme sin tus ojos
Dónde exiliarme sin tus ojos,
si el corazón no tiene patria
sino manos que laten y no abrazan,
si la calle, el sol, se asfixia sin tu boca,
si este pan no tiene piel y es hambre.
Dónde exiliarme sin tu noche,
sin las olas ni los bosques,
sin tus fuentes sobre el alma.
Cómo alejarme del abrigo de tus pasos,
del aroma de tus ojos,
del oasis de tu canto.
Cómo arrancarme de tu pecho
y no morir de sed,
sin luz ni voz,
ahogado en hiel y en sangre.
Domingo Acosta Felipe
martes, 14 de enero de 2014
Cuándo llega la tormenta
Cuándo llega la tormenta
hasta la angustia,
un terremoto fiero hasta la boca,
la furia y la desobediencia
como un pacto
en un abrazo extremo.
Camino y todo apesta,
permanece la desolación.
Sólo tus ojos tristes
que no se rinden nunca
buscando pájaros y sueños
donde sembrar de nuevo el día
y su sonrisa abierta y llena
como un banquete inesperado
con una silla y mesa
para todos.
Domingo Acosta Felipe
lunes, 13 de enero de 2014
Ningún poema
Ningún poema deja su nombre escrito sobre un labio.
Sólo el vacío inmenso y el derrumbe sin tus ojos
de esa boca abierta sin raíces
mientras sus letras vuelan y se acaban
con la tristeza de un punto.
Afortunadamente llegas,
la vida viene a visitarnos.
Domingo Acosta Felipe
domingo, 12 de enero de 2014
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