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domingo, 18 de diciembre de 2011
Instrucciones para olvidar
Buscar las huellas fugaces del silencio
y apresar la resonancia
que sigue excavando sus orillas.
Remontar el surco
de esa huida
que ensordece el aire
y naufraga
sobre las olas deslumbradas
del deseo.
Buscar los rastros invisibles,
escombros de una luz quebrada
por la interrogación del viento.
Y apagar el crepúsculo
con la última gota
del recuerdo.
Inés Ramón
sábado, 17 de diciembre de 2011
Graffiti
Parpadea
dentro de una mirada
pintada sobre el muro.
Atraviesa
con su eclipse inmóvil
todos los ríos de mi existencia,
convoca
mis peces invisibles
prisioneros en redes de cenizas.
Mira
una sombra de dientes apretados,
el vértigo que tiembla
avanzando hacia la nada.
Instaura la certeza
de habitar un tiempo que devora
los gritos de la huida,
Me clava
al laberinto de insomnio.
Y me cose en la frente
una búsqueda
infinita.
Inés Ramón
viernes, 16 de diciembre de 2011
¿Qué amor...
¿Qué amor
teje un velo
en el paisaje del ser?
¿Qué voz espanto
viste las ruinas
del entonces?
¿Qué irresistible pájaro
duerme
en la herida que soy?
Inés Ramón
jueves, 15 de diciembre de 2011
Intentar decirte la noche con fuego entre los dientes
Intentar decirte la noche con fuego entre los dientes.
Intentar disolver el silencio irreductible,
dibujar la voz que sí me pertenece
aunque respira en las grietas de la ausencia.
Intentar decirte un nombre
que envejece desnudo sobre el tiempo.
Intentar buscarte en el fondo
de los ojos de la tarde.
Y creer
que germinaba la vida
en mi palabra.
Inés Ramón
miércoles, 14 de diciembre de 2011
Eres
Eres
un fuego
de miradas entreabiertas.
Eres
la violencia que me nombra,
el sueño que regresa,
que avanza,
retrocede,
y se vuelve pensamiento.
Eres
el tiempo que vibra
y esculpe las noches y los días,
que busca un cauce
en las cenizas
de mi voz.
Inés Ramón
martes, 13 de diciembre de 2011
El secreto arde con la boca abierta
El secreto arde con la boca abierta,
jadea
como una jaula sin voces
detrás de las cortinas.
En el espacio que queda
la trampa de los ojos turbios
manosea el collar de mi dicha.
Soy un trapo que atraviesa
el rumor del viento,
que pregunta
al lagarto de niebla
cómo quebrar el movimiento de su lengua,
cómo soltar
la oscuridad sin puertas,
cómo acabar
ese concierto agónico,
cómo envenenar
su baba repugnante.
Inés Ramón
lunes, 12 de diciembre de 2011
Una grieta se abrió en mí como una lágrima
Una grieta se abrió en mí como una lágrima.
Desgarró mi desnudez,
mi perfecta simetría.
Y fue
agrietándose la noche,
el tiempo
agrietado;
los misterios,
agrietados;
los soles
chorreando cenizas
por las grietas.
Los despojos,
los miedos,
todos los vértigos,
agrietados.
Y fue en mí sedienta herida
para beber a sorbos el rocío
y sus reflejos dorados,
para respirar
la inmensidad sin grietas
y abrir
aquel jardín perpetuamente ahogado.
Y libre, por fin, sin equipajes,
sin despedidas,
volar,
surgir,
llegar
al otro lado.
Inés Ramón
domingo, 11 de diciembre de 2011
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